Rechinar los dientes (bruxismo)
Acerca del Servicio
El término formal para rechinar los dientes es "bruxismo", una palabra acuñada a principios del siglo XX por Marie Pietkiewicz, que se refería al rechinar compulsivo de dientes como 'la bruxomanie'. Más tarde, "bruxismo" se convirtió en el término aceptado para describir este comportamiento inconsciente. El bruxismo entra en la categoría de comportamientos "parafuncionales", junto a acciones como golpearse los dientes, morderse las mejillas y los labios, morderse las uñas y empujar la lengua.
Bruxismo, alias: rechinar los dientes
El término formal para rechinar los dientes es "bruxismo", una palabra acuñada a principios del siglo XX por Marie Pietkiewicz, que se refería al rechinar compulsivo de dientes como 'la bruxomanie'. Más tarde, "bruxismo" se convirtió en el término aceptado para describir este comportamiento inconsciente. El bruxismo entra en la categoría de comportamientos "parafuncionales", junto a acciones como golpearse los dientes, morderse las mejillas y los labios, morderse las uñas y empujar la lengua.
El rechinar de dientes se presenta de dos formas: bruxismo durante el sueño y bruxismo durante la vigilia. Aunque se trata de trastornos distintos, no son mutuamente excluyentes. Hoy nos centraremos en el bruxismo del sueño, que suele ser más difícil de identificar y tratar.
Entender el bruxismo del sueño
El bruxismo del sueño consiste en una actividad rítmica, repetitiva e involuntaria de los músculos de la mandíbula durante el sueño. Esta actividad provoca un contacto enérgico entre los dientes superiores e inferiores, a menudo acompañado de sonidos desagradables. También es frecuente el apretamiento, caracterizado por un contacto sostenido y enérgico de los dientes sin movimientos laterales de la mandíbula. Por término medio, las personas que rechinan los dientes lo hacen de dos a cuatro veces por hora de sueño. Cuando el rechinamiento se produce con esta frecuencia, se clasifica como trastorno del sueño. Curiosamente, aproximadamente el 60% de la población presenta una leve actividad similar a la masticación durante el sueño, que no se clasifica como bruxismo del sueño, sino más bien como un movimiento psicológico relacionado con el sueño.
El bruxismo plantea retos a los dentistas, ya que puede dañar rápidamente los trabajos dentales de restauración. Aunque en la mayoría de los casos el bruxismo del sueño se manifiesta como rechinar de dientes durante el sueño, también puede ser síntoma de otros trastornos subyacentes, que requieren un diagnóstico y un tratamiento adicionales. Entre ellos se encuentran la apnea obstructiva del sueño, el reflujo gastroesofágico, el síndrome de las piernas inquietas, el trastorno del comportamiento durante el sueño REM, la epilepsia relacionada con el sueño, el autismo y el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).
¿Por qué nos rechinan los dientes?
La causa directa del bruxismo del sueño sigue siendo elusiva, y es probable que los factores psicológicos desempeñen un papel importante, aunque faltan pruebas concluyentes. Algunos profesionales creen que las personas que rechinan los dientes son más sensibles al estrés y la ansiedad.
El bruxismo está regulado centralmente, originándose como una alteración del sueño en el sistema nervioso central en lugar de ser desencadenado o controlado por factores periféricos en la boca. No está causado por enfermedades infecciosas, ni es un tic o una reacción desencadenada por prótesis dentales mal fijadas.
El bruxismo del sueño afecta a casi el 10% de la población general, siendo los niños y adolescentes más propensos a padecerlo (hasta el 40% de los niños de 11 años rechinan los dientes). La población anciana parece estar menos afectada, aunque estos datos pueden no ser concluyentes debido a factores como la falta de dientes o la ausencia de un compañero que informe de los sonidos del rechinar de dientes. Los síntomas relacionados con el bruxismo pueden variar con el tiempo, y las personas experimentan distintos niveles de frecuencia de rechinamiento dental a lo largo de su vida.
Estas son algunas de las preguntas más frecuentes
El bruxismo (también llamado rechinar de dientes) es una afección en la que el paciente rechina o aprieta los dientes. Puede ocurrir durante el día, cuando una persona aprieta los dientes sin darse cuenta (bruxismo despierto) o durante la noche, cuando la persona aprieta o rechina durante el sueño (bruxismo del sueño). El bruxismo del sueño se considera uno de los trastornos del movimiento relacionados con el sueño, entre los que se incluyen: el síndrome de las piernas inquietas, el trastorno del movimiento periódico de las extremidades, los calambres en las piernas relacionados con el sueño, el trastorno del movimiento rítmico relacionado con el sueño, entre otros.
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Signos de rechinar los dientes o bruxismo durante el sueño
Los signos y síntomas del rechinar de dientes pueden no ser siempre evidentes. El desgaste anormal de los dientes, los músculos de la mandíbula doloridos, los dolores de cabeza matutinos y los músculos de la mandíbula sobreentrenados son indicadores comunes del rechinamiento de los dientes. Además, el bruxismo puede provocar el síndrome de la ATM, causando dolor al abrir o cerrar la boca o al masticar.
Otros signos pueden ser dolor de cuello, dolores de oído, pérdida de audición, pitidos en los oídos, inflamación de las glándulas salivales, hinchazón e inflamación periódicas y sequedad anormal de la boca. Sin embargo, no todos los síntomas pueden estar presentes o ser perceptibles en todos los individuos, ya que algunos pueden permanecer asintomáticos a pesar de una intensa actividad de rechinamiento durante el sueño.
Contrariamente a la creencia popular, el grado de desgaste de los dientes no está directamente correlacionado con la intensidad o frecuencia del rechinamiento dental. El desgaste de los dientes depende de factores como la calidad del esmalte, la composición de la saliva, la ingesta de ácidos y la presencia de reflujo gastroesofágico.
Qué hacer si sospecha que rechina los dientes por la noche
Si sospechas que rechinas los dientes por la noche (¡o quizás tu pareja te ha dicho que rechinas los dientes por la noche!), deberías consultar a un dentista y pedir cita para que evalúe los posibles daños.
Si su dentista le ha sugerido que puede estar rechinando los dientes por la noche, es esencial que tome medidas para proteger su salud dental. Aunque algunas personas no presenten síntomas evidentes, como dolor en la mandíbula o dolor de cabeza, los signos sutiles pueden plantear problemas a largo plazo. Si no se tratan, pueden provocar dolores y molestias graves que son mucho más difíciles de tratar cómodamente.
El siguiente paso es considerar la posibilidad de colocarse un protector nocturno o bucal. Aunque la idea de llevar una pieza de acrílico mientras se duerme puede parecer desalentadora, los protectores nocturnos personalizados de su dentista ofrecen un mejor ajuste, mayor durabilidad y mayor comodidad. El rechinamiento severo de los dientes puede provocar a largo plazo daños dentales, pérdida de dientes, trastornos de la ATM, alteraciones de la estructura facial y otras complicaciones, por lo que las medidas de protección son esenciales para mantener la salud dental.
¿Cómo puedo aliviar el dolor de mandíbula causado por el rechinar de dientes?
El dolor de mandíbula es un síntoma común del rechinar de dientes, también conocido como bruxismo. Afortunadamente, existen varias estrategias que puede emplear para aliviar esta molestia. Su dentista puede recomendarle practicar técnicas de relajación, como la meditación o ejercicios de respiración profunda, para reducir el estrés y la tensión en los músculos de la mandíbula. Aplicar calor o bolsas de hielo en la zona afectada también puede ayudar a aliviar el dolor y la inflamación. Además, los ejercicios y estiramientos suaves de la mandíbula pueden ayudar a mejorar la flexibilidad y reducir la tensión muscular. En algunos casos, el dentista puede recetar relajantes musculares o recomendar el uso de un protector bucal o férula a medida para evitar daños mayores en los dientes y aliviar el dolor mandibular asociado al bruxismo.
¿Rechinar los dientes puede dañarlos?
Sí, el rechinar de dientes puede causar daños significativos a sus dientes con el tiempo. La presión y fricción excesivas del rechinamiento pueden desgastar la capa protectora del esmalte, provocando sensibilidad dental, astillas, fracturas e incluso la pérdida de dientes en casos graves. Además, el rechinamiento puede hacer que los dientes se aplasten, desgasten o desarrollen superficies irregulares, afectando a su aspecto y función. Si no se trata, el daño causado por el bruxismo puede requerir tratamientos dentales exhaustivos, como empastes, coronas o incluso extracciones dentales para restablecer la salud y la función bucal. Por lo tanto, es esencial abordar el rechinamiento de dientes con prontitud y buscar el tratamiento adecuado para evitar daños mayores a sus dientes y estructuras orales.
¿Cómo puedo evitar que me rechinen los dientes?
La prevención del rechinamiento de los dientes suele implicar abordar los factores subyacentes que contribuyen a este trastorno, como el estrés, la ansiedad o la desalineación de los dientes. Su dentista puede recomendarle varios enfoques de tratamiento, como técnicas de control del estrés, ejercicios de relajación y modificaciones del estilo de vida para reducir los síntomas relacionados con el bruxismo. Además, el uso de un protector bucal o férula a medida durante el sueño puede ayudar a proteger los dientes de los efectos del rechinamiento y aliviar el dolor y las molestias mandibulares asociados. Es esencial seguir las recomendaciones del dentista y someterse a revisiones dentales periódicas para controlar la salud bucodental y abordar cualquier problema subyacente que contribuya al rechinamiento de los dientes.
¿Cuáles son las consecuencias de rechinar los dientes sin tratamiento?
Si no se trata, el rechinamiento de los dientes puede provocar diversos problemas y complicaciones de salud bucodental, como el desgaste del esmalte dental, fracturas dentales, dolor de mandíbula y trastornos de la articulación temporomandibular (ATM). Con el tiempo, la presión y fricción excesivas del rechinamiento pueden causar daños irreversibles en los dientes y las estructuras bucales circundantes, lo que lleva a procedimientos dentales costosos e invasivos para reparar el daño. Además, el bruxismo crónico puede provocar dolores de cabeza, dolor facial y alteraciones del sueño, lo que afecta negativamente a su calidad de vida en general.